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Esperanza es la gerente del Hotel Boonsboro que Justine Montgomery y sus tres hijos, Beckett, Owen y Ryder, han restaurado con mucho esmero y buen gusto. Es la íntima amiga de Claire y Avery, y acaba de terminar una relación con Jonathan, el hijo del propietario del prestigioso hotel de Georgetown donde trabajaba antes. Estaba muy enamorada de él cuando le comunicó, sin previo aviso y total cinismo, su próximo matrimonio con una joven de clase alta. Ahora se ha volcado en su nuevo puesto, y nuevo hogar, y también en un trabajo de investigación: quiere averiguar quién era Lizzy, la joven enamorada cuyo fantasma se pasea por el hotel, dejando tras de sí un intenso olor a madreselva. Esperanza está feliz en Innsboro, feliz de haber dejado atrás su desgraciada historia con Jonathan, y encantada con su nuevo puesto y la compañía de sus dos amigas; pero algo falta en su vida... y los hermanos Montgomery son tres.

OPINION

Cada vez que leo un nuevo libro de Nora Robets, termino con la satisfacción de haber leído algo bueno y que me ha hecho soñar un poco con una realidad diferente, me deja con la sonrisa en la boca.

Esta es la tercera entrega de la serie Hotel Boonsboro y la historia de Esperanza (un precioso nombre) y el pequeño de los hijos de Justine (un gran personaje que adorna este libro), Ryder.

Esperanza, no es del lugar, ha venido de Georgetown, huyendo de una mala situación, en su trabajo y con el hombre que creía amar y que la ha engañado. Cuando llega a este pequeño lugar, la ilusión con la que empieza su trabajo como generente del hotel, es grandiosa. Ella es una persona muy organizada y que siempre ha tenido éxito en su trabajo, por lo que aquí, también se siente su presencia.

Ryder, por otro lado, es un poco cabeza loca y bastante cerrado, le ha gustado lo que ha visto, cuando ha conocido a Esperanza, pero lo niega con toda su alma. No soporta a esta chica de ciudad, que sin querer él, le atrae muchísimo.

Aquí interviene también el famoso fantasma del hotel, el cual está empeñado en conseguir la unidad de estas dos personas y la resolución de su problema, que no digo cual es, para no estropear el descubrimiento.

Cabe destacar los diálogos super divertidos entre Esperanza y Ryder y entre Ryder, sus hermanos y su madre (Justine).

La historia de amor es preciosa y la última conversación de ellos, casi al final del libro y antes del Epílogo, es muy tierna y bonita.

La participación de todos los hermanos y parejas, está muy presente en la narración, lo mismo que la vida diaria de esta pequeña localidad.

Al final, se aclaran todas las incognitas y resulta muy agradable, la lectura de esta novela.

Valoración: Bueno alto